lunes, 3 de mayo de 2010

Aunque te hable con desprecio, no perdono; mucho menos olvido. Déjame ir, no quiero volver a tus brazos, otros me llaman; otros que puedan llegar a abrazarme fuerte y no dejarme escapar, otros que prefieran no soltar más a un nuevo amor. Te amé con locura y decesperación, pero es momento de decirte adiós. Hoy formas parte de un pasado, más alla de un olvido. Tú eres el olvido, tu error sigue presente en mi memoria minuto a minuto.
Ya olvidé que alguna vez te amé.